“¿Y si en lugar de perseguir la felicidad nos quedáramos quietos para que ella nos alcance?”
La felicidad es la consecuencia de una manera de vivir, es lo que nos deja una vida con sentido, con empatía, con propósitos y horizontes que vayan más allá de nuestro ombligo. La felicidad es lo que nos alcanza cuando vivimos de modo que mejoramos un poco el mundo. Y para eso no sirve correr, hay que estar. (Sergio Sinay)